miércoles, 3 de octubre de 2007

Delirio

Acontece en la noche una empresa
y es querer
exprimir el zumo de mi tristeza.

Aún siguen respirando las estrellas
al amanecer
el oxígeno de sus venas.

Es la pasión que, esbelta,
no quiere perecer
sin antes recordar la escena.




........."It's not what you said...
......It's just how you said it to me"

8 comentarios:

Cåttberry dijo...

holaaa! muchas gracias por el comentario!!! y también por ese link bajo un título tan honorífico como "Gods and Godess".
En fin, que vaya todo muy bien!
un saludo!!

Ricardo J. Román dijo...

Muy buena página, eh. Mucho misterio, oscura, atractiva hasta cierto punto. Tienes poemas en tu página muy buenos. Me recuerdas a veces a Gustavo Adolfo Becquer.

Un abrazo.

Luciérnaga dijo...

Velocet tú eres un grande, eh!

El poema de "hasta entonces" me encantó- además la posición me hizo leerlo con la sonrisa en la boca (todavia la mantengo!!).

Sobre tu coment, las mayúsculas se me colaron!!

Voy a linkearte tb ahí para q más gente pueda disfrutar de ti!

Un beso, amigo!!

Velocet dijo...

Auch :´)

Partageé dijo...

Necesitas al mercader de licuadoras, yo a un profesor de escapismo ;-).
He soplado las velas de esta extraña tarta de higados, uñas y cabellos, mi deseo: tu última estrofa... el resultado por ahora es un bono de nuevos amaneceres que aunque lluviosos traen chocolate caliente y partidas al Teken (aunque la gente me pida jugar al 1,2,3 pica-pared habiéndose tragado ya la llave).
¿Te vienes a dibujar paréntesis?
Tu Delirio parece parido de lágrimas causadas por una flebitis aguda, me encantó, como siempre.
Un Abrazo.

Velocet dijo...

Si a alguien le pica la curiosad, la canción de esta entrada es de Micah P. Hinson (Stand in my way).

:)

Víktor Gómez Valentinos dijo...

No lo que dices
sino desde que abecedario
con qué cincel
y en que tono transcribes
los paisajes
y sus vibraciones
hace que lo íntimo
sea común territorio
para acampar bajo la noche
previa a la batalla.

No rendirse, no huir:

Esperar a que el sol
permita
identificar monstruos,
fantasmas,
alambradas,
el fango, la trinchera,
los enemigos.

Así es siempre
que uno se atreve
a enfrentarse,
-vida adentro-,
con sus demonios.

Amar en siempre un riesgo no impune, una posibilidad
de acierto o derrota.

Vivir es un tenso re-equilibrio, un vaiven de amorodio, un salto del todo al vacío y viceversa:

vértigo y espera.




Buen jueves,

Víktor

Velocet dijo...

Uf. Ante esto mis palabras sobran.

u_u

:D